Últimamente, muchas personas han recibido una llamada de estafa haciéndose pasar por el SAT. La voz del otro lado del teléfono suena seria, urgente y hasta mencionan su RFC y depósitos recientes.
Este tipo de fraudes telefónicos están diseñados para asustarte, hacerte dudar y sacarte información personal, o hasta dinero. Y aunque suene creíble, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) no te llama por teléfono para pedirte datos ni para “evitar bloqueos”.
En este artículo te explicamos cómo funciona esta llamada de estafa, qué buscan los estafadores, cómo identificarla, qué hacer si la recibes y cómo protegerte para no caer en el engaño.
¿Cómo funciona esta estafa?
La llamada llega de un número desconocido o aparentemente “oficial”. Al contestar, una grabación automatizada te habla con tono serio, usando términos fiscales y bancarios para parecer legítima. Lo que buscan es que te asustes y sigas las instrucciones sin pensarlo dos veces.
Todo esto lo hacen para crear una sensación de urgencia y presión. Pero en realidad, es solo una trampa bien montada para que les entregues información confidencial. Estos son los puntos clave que se escuchan en el audio de la llamada:
- Mencionan tu RFC y supuestos depósitos recientes: “Hemos detectado depósitos y transferencias con su RFC que superan los $50,000 pesos”.
- Amenazan con bloquear tus cuentas: “Para evitar el bloqueo de sus cuentas y tarjetas, necesitamos aclarar estas operaciones”.
- Te hacen creer que el SAT está interviniendo: “El Servicio de Administración Tributaria del SAT nos está solicitando información de sus cuentas”.
- Te dan opciones para hablar con un supuesto “ejecutivo fiscal”: “Presione 1 o 9 para hablar con un ejecutivo fiscal bancario”.
¿Por qué esta llamada es una estafa?
Esta llamada es una estafa porque el SAT no te llama por teléfono para pedirte información personal, fiscal o bancaria. Tampoco amenaza con bloquear tus cuentas ni solicita aclaraciones de movimientos por llamada.
Cuando el SAT necesita comunicarse contigo, lo hace exclusivamente a través del Buzón Tributario, un sistema seguro al que solo tú puedes acceder con tu contraseña y firma electrónica. En algunos casos, puede enviarte correos o mensajes de texto, pero jamás te va a llamar para presionarte o pedirte que marques un número en automático.
¿Qué quieren conseguir los estafadores?
Su objetivo es claro: conseguir tu información personal y financiera. Esto es lo que puede pasar si presionas 1 o 9, como lo indica la grabación:
- Te enlazan con una persona que finge ser parte del SAT o del “departamento fiscal de tu banco”.
- Esa persona usa lenguaje técnico y datos falsos para ganar tu confianza.
- Después, te pide que “verifiques tu identidad” con datos como tu CURP, RFC, número de cuenta, clave bancaria o hasta los dígitos de tu tarjeta.
Incluso, en llamadas como estas también podrían pedirte descargar una app, dar acceso remoto a tu celular o realizar un “depósito temporal para liberar tus cuentas”.
Todo es mentira. Lo único que quieren es engañarte para tener acceso a tu información y, como consecuencia, a tu dinero.
¿Qué hacer si recibes una llamada de estafa de alguien haciéndose pasar por el SAT?
Si recibes una llamada en la que te dicen que es el SAT buscándote, lo primero es mantener la calma. Aunque el mensaje suene alarmante, no respondas a lo que te piden. Estas llamadas están diseñadas para que entres en pánico y tomes decisiones rápidas.
Esto es lo mejor que puedes hacer:
- No entres en pánico. No importa si mencionan montos grandes o tu RFC, eso no significa que sea real.
- No proporciones ningún dato personal, fiscal o bancario.
- Cuelga inmediatamente. No marques ningún número ni sigas las instrucciones.
- Bloquea el número desde tu celular para evitar futuras llamadas.
- Verifica directamente en tu Buzón Tributario si hay alguna notificación oficial del SAT.
- Reporta la llamada a las autoridades correspondientes (SAT, Condusef o Policía Cibernética).
- Advierte a tus familiares o personas cercanas. Compartir esta información puede evitar que alguien más caiga.
¿Por qué están usando tu RFC y tus depósitos como gancho?
Porque quieren asustarte. Así de simple. El uso de términos como “RFC”, “transferencias superiores a $50,000” o “bloqueo de cuentas” está pensado para sonar oficial y hacerte dudar. Apelan al miedo y la urgencia para que actúes sin verificar la información.
Este tipo de mensajes están diseñados para que te pongas nervioso y pienses: ¿Será que hice algo mal con mis impuestos? ¿Y si de verdad van a congelar mi cuenta? Ese momento de duda es justo cuando los estafadores aprovechan para manipularte.
Señales para identificar que es falsa
Aunque estas llamadas están muy bien producidas, hay pistas claras para identificar que se trata de una estafa. Si notas una sola de estas señales, ya es suficiente para desconfiar y colgar:
- Viene de un número desconocido o no verificado.
- Usa grabaciones automáticas con lenguaje intimidante.
- Menciona montos altos o supuestos movimientos sospechosos.
- Pide que marques un número para hablar con un “ejecutivo”.
- Dice representar al SAT, pero no ofrece ningún canal oficial de contacto.
- Usa frases como “última advertencia” o “bloqueo inmediato”.
¿Dónde puedes reportar este tipo de llamadas?
Si recibiste una llamada así, puedes reportarla a las siguientes autoridades. Hacer el reporte ayuda a que más personas estén alertas y se frene este tipo de fraudes.
- SAT: llama al 55 627 22 728 (MarcaSAT) o ingresa a www.sat.gob.mx y busca el apartado de denuncias.
- Condusef: si la llamada menciona también a tu banco, puedes reportarlo en www.condusef.gob.mx o al 55 53 40 09 99.
- Policía Cibernética de la Guardia Nacional: por correo a denuncias@sspc.gob.mx y por WhatsApp al 55 89 00 07 37.
¿Cómo proteger tus datos y evitar caer en este tipo de fraudes?
En un mundo donde cada vez más trámites se hacen por teléfono o internet, proteger tu información personal y financiera es clave. Las llamadas de estafa como la del SAT están a la orden del día, así que lo mejor que puedes hacer es estar alerta y saber cómo reaccionar.
Medidas básicas de prevención:
- Nunca compartas datos personales o bancarios por teléfono, aunque quien te llame suene muy convincente.
- Verifica la información en canales oficiales antes de actuar: entra a tu Buzón Tributario o comunícate directamente con el SAT.
- Configura alertas en la app de tu institución financiera para monitorear movimientos en tiempo real.
- Habla con tus personas cercanas sobre estas estafas para que también estén prevenidas.
¿Ya diste información por error? No te sientas mal, le puede pasar a cualquiera. Lo importante es actuar rápido:
- Bloquea tu tarjeta o cuenta desde la app de tu institución financiera, si diste algún dato bancario.
- Cambia tus contraseñas si compartiste accesos.
- Reporta el caso al SAT, Condusef o la Policía Cibernética (te dejamos los datos más arriba).
- Comunícate con la institución financiera para reportar la situación y recibir orientación sobre qué más puedes hacer.
- Monitorea tus cuentas y tu historial crediticio en los días siguientes.
Que no te sorprendan con llamadas de estafa
Las estafas telefónicas que se hacen pasar por el SAT están diseñadas para sonar creíbles, urgentes y atemorizantes. Pero si sabes cómo funcionan, es mucho más fácil protegerte. Lo más importante que debes recordar es que el SAT no te llama por teléfono para pedirte información ni para amenazarte con bloqueos.
Comparte esta información con tu familia y amistades; mientras más personas estemos informadas, más difícil será que los estafadores logren su objetivo. Que no te agarren en curva: estar bien informado es tu mejor defensa.
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