En los últimos años, la personalización ha llegado con fuerza al mercado de consumo. Darle un toque personal a todo lo que se pueda, desde el café, ropa, experiencias, etc. se ha convertido en una tendencia que va más allá de la moda. Pero, ¿qué pasa cuando esta tendencia se cruza con algo tan serio como tus tarjetas de crédito? Los stickers para tarjetas de crédito parecen una extensión natural de esta ola de personalización, pero son una historia diferente en la que hay más en juego.
En este artículo, vamos a ver por qué tendrías que pensártelo dos veces antes de transformar tu tarjeta de crédito en una pieza de arte personal.
¿Qué son los stickers para tarjetas de crédito?
Los stickers para tarjetas de crédito son más que simples calcomanías; se han convertido en una moda que aprovecha las redes sociales para llegar a sus clientes. Las empresas que las ofrecen prometen transformar el aspecto de tus tarjetas de crédito o débito con diseños personalizados e incluso cambiando el material original de la tarjeta por resinas o metales.
Este proceso de personalización requiere que mandes tu tarjeta o al menos una parte de ellas, como el chip, a través de mensajería, lo que supone un riesgo significativo. Aunque se promete confianza y seguridad, la realidad es que al enviar tu tarjeta estás exponiendo tu cuenta a posibles riesgos de seguridad.
Considera los riesgos antes de personalizar tu tarjeta
Personalizar tu tarjeta de crédito con una sticker podría exponerte a serios riesgos de seguridad. Tu tarjeta de crédito representa algo más que un plástico; es un vínculo entre tú y la institución financiera, portadora de datos sensibles y, sobre todo, de confianza y seguridad.
Al enviar tu tarjeta por correo, datos críticos como el número de tarjeta, el CVV y la fecha de expiración quedan vulnerables, lo cual facilita el fraude.
La Condusef ha hecho un llamado para evitar los servicios de personalización de tarjetas de crédito, subrayando que incluso un procedimiento aparentemente seguro, como enviar solamente el chip, no elimina el riesgo de comprometer tus cuentas bancarias. Este chip contiene información esencial que, si se manipula incorrectamente, podría dar acceso no autorizado a tu cuenta.
Por lo tanto, personalizar tu tarjeta a través de terceros podría poner en juego tu seguridad financiera y generarte otras complicaciones que veremos a continuación.
¿Qué pasa si le pongo un sticker a mi tarjeta de crédito?
Ponerle un sticker a tu tarjeta de crédito puede parecer una forma divertida de expresar tu estilo personal, pero, además de la seguridad tiene otras consecuencias que podrías no haber considerado.
Antes de lanzarte y decidir entre tu equipo de futbol o tu Avenger favorito, detente a pensar por un momento qué podría pasar si decides darle ese toque personal a tu tarjeta:
1. El cajero podría tragarse tu tarjeta
Imagina que estás apurado y necesitas sacar dinero, pero al meter tu tarjeta con sticker en el cajero, ¡zas! Se atasca. Aunque esto aplica más bien para las tarjetas de débito, lo mismo podría pasar si metes tu tarjeta de crédito en una terminal para pagar. Además de otras prácticas de uso seguro en cajeros automáticos que hay que tomar en cuenta, esto sucede porque el sticker puede empezar a despegarse o deteriorarse con el uso, lo que hace que la tarjeta no deslice correctamente y termine causando un bloqueo. Definitivamente, no quieres estar haciendo fila en el banco para resolver esto un lunes por la mañana.
2. Los datos de tu tarjeta ya no se ven
¿Alguna vez has intentado comprar online y te piden el número de tu tarjeta, pero está cubierto por ese sticker tan “cool” que pusiste?
Si cubres la información sensible de tu tarjeta de crédito, como el número de la tarjeta, la fecha de vencimiento o el CVV, podrías verte en aprietos al intentar hacer compras sin tener acceso fácil a estos datos. Más aún si perdiste ese papelito donde los anotaste y que luego guardaste en ese lugar “para que no se te olvide”.
3. Cubres la bandera de tu tarjeta y los comercios no podrán saber si es MasterCard o Visa
Poner un sticker en tu tarjeta de crédito también tapa los logos de Visa, Mastercard o American Express. Estos no están ahí solo porque se ven bonitos; son un símbolo de seguridad y aceptación a nivel mundial.
Si tapas ese distintivo, podrías toparte con que algunas tiendas duden si aceptar o no tu tarjeta, limitando su funcionalidad y tu acceso a servicios y compras y beneficios en miles de lugares alrededor del mundo.
4. La terminal no puede leer el chip o la banda magnética
Los stickers para tarjetas de crédito que quedan sobre la banda magnética o el chip pueden afectar su funcionalidad. Piensa en qué pasará cuando vayas a pagar en la tienda, pasas tu tarjeta y… ¡sorpresa! No funciona porque el sticker está bloqueando el chip o desmagnetizando la banda.
Como si trataras de usar tu teléfono con una funda que tapa la cámara, no tiene mucho sentido, ¿verdad?
5. Ocultas el logotipo de tu institución financiera
Cuando tienes una tarjeta de crédito es muy importante saber qué institución le brinda respaldo y en muchos casos beneficios extras, tan solo por tenerla. Al cubrir el logo de tu institución financiera estarás escondiendo no solo la imagen de tu banco, sino todo lo que representa: seguridad, soporte y prestigio internacional.
Aunque al pagar, muchos puntos de venta reciben la información sobre la tarjeta con la que se realiza la transacción, no mostrar claramente a qué institución pertenece tu tarjeta, podría llevarte a situaciones donde no puedas aprovechar plenamente los beneficios de ser parte de esa institución financiera en específico.
¿Te imaginas que no te acepten unos meses sin intereses para una compra mayor?
Estética vs seguridad: ¿vale la pena el riesgo?
Personalizar tu tarjeta de crédito con stickers puede parecer una manera divertida y atractiva de expresar tu individualidad, pero los riesgos asociados son demasiado significativos para ignorarlos.
Por lo tanto, antes de decidir darle un toque personal a tu tarjeta de crédito, considera las implicaciones que puede tener hacerlo. Mantener la integridad de tu tarjeta no solo protege tu dinero, sino que asegura que puedas continuar disfrutando de los beneficios que tu institución financiera ofrece sin inconvenientes.
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