Por ahí dicen que el dinero no se da en maceta. Es por eso que cuando se trata de nuestro bolsillo, constantemente estamos buscando opciones que nos permitan hacer más con nuestro dinero. Resulta importante optar por productos financieros que nos ayuden a cumplir este objetivo, ya sea porque ofrecen cashback, recompensas o rendimientos.
Pero, ¿cómo saber qué producto financiero elegir para que nuestro dinero florezca? En lo que respecta a los productos financieros de débito, existen cuentas que ofrecen dos opciones para que nuestro bolsillo llegue más lejos.
¿Cuál es la diferencia entre cashback, recompensas y rendimientos?
Las recompensas y los rendimientos son conceptos financieros que se refieren a dos tipos distintos de ganancia que se dan como beneficio al usar un producto financiero.
Aunque puede ser que estos términos se usen de forma intercambiable, hay diferencias importantes entre ellos. Una de las principales es que el cashback y las recompensas se enfocan más en el gasto mientras que los rendimientos están directamente ligados al ahorro.
¿Qué son el cashback y las recompensas?
Los programas de recompensas ofrecen puntos, dinero, o algún tipo de beneficio por cada compra que haces. Existen distintos tipos de recompensas:
- Cashback. Este tipo de recompensas te reembolsa un porcentaje del dinero que has gastado. Si bien el porcentaje del dinero que se reembolsa puede variar, generalmente está entre el 1% y el 3%.
- Acumulación de puntos. Algunas tarjetas te premian con puntos por cada compra que haces. Puede ser que te den 5 puntos por cada $1000 que gastas. Por lo general, cada 10 puntos acumulas $1 que después puedes usar en otras compras.
- Programas de lealtad, millas y descuentos. Aunque este tipo de recompensas están más asociadas a otro tipo de tarjetas, vale la pena mencionarlas. Los programas de lealtad pueden recompensarte con millas (si se trata de tarjetas asociadas con aerolíneas) o descuentos que puedes usar para seguir comprando en el mismo sitio. Estos beneficios tienen la limitante de que no puedes usar estas recompensas libremente.
Si bien un programa de cashback o recompensas te da algo, al final es necesario que gastes para obtener esa ganancia.
En este tipo de programas también es importante echar ojo a las condiciones y vigencia de las recompensas, así como a la forma en la que puedes utilizar el saldo proporcionado por el cashback. Es posible que algunas recompensas solo puedan utilizarse en determinados establecimientos, apps o para hacer cierto tipo de compras.
¿Qué son los rendimientos?
Los rendimientos son las ganancias que se obtienen al invertir dinero. Cuando hablamos de rendimientos en una cuenta de débito, nos referimos al porcentaje de intereses que se generan por tener dinero en esa cuenta.
En algunas cuentas, el porcentaje de los rendimientos se genera según un saldo promedio, mientras que en otras se pide un saldo mínimo para poder ganar intereses.
En cualquier caso, entre más dinero tengas ahorrado, mayores serán los intereses que se produzcan, independientemente de la tasa.
Si bien las cuentas de débito son productos financieros que generan rendimientos pequeños, siempre es buena idea conocer la GAT para tomar la mejor decisión.
Cashback, recompensas o rendimientos ¿cómo saber qué es más conveniente?
Saber qué es más conveniente, si el cashback, las recompensas o los rendimientos, depende enteramente de cuáles sean tus objetivos y tus necesidades financieras.
Las tarjetas de débito que ofrecen cashback y recompensas pueden ser una buena opción si lo que buscas es obtener puntos, descuentos en compras o un porcentaje de reembolso por tus compras.
Es cierto que hay gastos que tenemos que hacer sí o sí, ¿por qué no sacar alguna ganancia por pequeña que esta sea? Los programas de recompensas parecen ser una buena idea cuando se trata de pagar servicios y consumos que son necesarios para nuestra vida.
Por su parte, las tarjetas de débito que dan rendimientos son una buena opción si lo que buscas es ganar en intereses al tener dinero ahorrado.
Algo que hay que tener en cuenta para decidir es fijarse en la tasa de interés que ofrece el rendimiento, así como los requisitos que hay que cumplir para recibir las recompensas.
Cuál sea la mejor opción dependerá bastante de tus objetivos financieros y tus hábitos de gasto. Vale la pena que te preguntes si es realmente ventajoso recibir $5 por cada $1000 que gastas, o dejar que tu dinero produzca el 5% de su totalidad sin tener que gastar en compras.
Si usas mucho una tarjeta, o la usas para gastos grandes, es posible que el cashback y las recompensas te convengan.
Pero si tienes un gasto más modesto, puede ser que el cashback y las recompensas, ya sea en millas o descuentos, sean muy pequeños frente a los gastos que te implica esa tarjeta.
A lo mejor hay tarjetas que no tienen cashback pero no te cobran anualidad ni comisiones. Tal vez haya tarjetas de débito que no te ofrecen recompensas pero tienen rendimientos más altos que te traerán beneficios a largo plazo.
Lo más importante es poner en una balanza el costo de una tarjeta y qué tan reales son los beneficios que ofrecen. Al final, elegir entre cashback, recompensas o rendimientos va a depender de qué estemos buscando: si un estímulo para gastar o un estímulo para ahorrar.
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